PERSECUCION Y BALACERA A RECONOCIDO PILOTO DE AUTOMOVILISMO (la verdadera historia).-

Buenos Aires,6 de febrero de 2009.- Lue­go de intensa per­se­cu­ción y ba­la­ce­ra, ele­men­tos de la Guardia Pretoriana del conocido y prestigioso piloto Carlos Alberto (a quien vemos en la foto con su inseparable compañero de pistas Damian ALVAREZ) de­tu­vie­ron a cin­co su­je­tos, in­te­gran­tes de una po­de­ro­sa ban­da de delincuentes, fuer­te­men­te ar­ma­dos cuando in­ten­ta­ban amedrentar vanamente al mencionado ídolo popular de arrecifes.

Al mo­men­to de su de­ten­ción, a los de­lin­cuen­tes que via­ja­ban en motos de alta cilindrada, se les de­co­mi­só dos me­tra­lle­tas R-15, un "cuer­no de chi­vo" AK-47, tres car­ga­do­res com­ple­ta­men­te abas­te­ci­dos de di­chas ar­mas, otro car­ga­dor y va­rios car­tu­chos y cas­qui­llos úti­les de pis­to­las .9 mi­lí­me­tros y .45, con los cuales balearon a la humilde camioneta del señor Carlos Alberto.

La Policía Federal in­di­có, que los he­chos que die­ron ori­gen a la de­ten­ción de es­tos su­je­tos, se re­gis­tra­ron en la mañana de ayer, en el barrio de Caballito de la Ciudad de Buenos Aires, cuando los malvivientes apuntaron al Señor Carlos Alberto, y este les contestó que esperaran unos minutos que tenía que terminar el embarque y coordinar con su Ingeniero de Pista Damian que presión le iban a poner a los neumáticos el próximo fin de semana.

Ante la insensibilidad de los delincuentes, que no querían esperar que Carlos Alberto terminara con sus menesteres, empezaron a disparar, llegando a tirar más de 150 tiros que no dieron, en la camioneta de ARRAÑA, gracias a su pericia conductiva. Lue­go el mencionado Carlos Alberto llamó a su Guardia Pretoria, integrada entre otros por sus laderos Charlie y JULIO, quienes al llegar a la zona capturaron a los delincuentes y le inquirieron por el hecho de no haber dejado cerrar el embarque al conocido piloto automovilístico.-

Por suerte el bien ha vuelto a triunfar sobre el mal, y los malvivientes terminaran sus días en la cárcel como se merecen.-