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Encierro limpio y rápido para empezar los Sanfermines
Los toros de la ganadería cordobesa de Alcurrucén no han dejado heridos por asta aunque si ha habido cuatro personas con traumatismos.-Pamplona. (Agencias).- Seis toros de la ganadería cordobesa de Alcurrucén han inaugurado los encierros de los Sanfermines con una carrera limpia y rápida que ha transcurrido sin mayores incidentes durante sus dos minutos y medio de duración. Cuatro personas fueron trasladadas a los hospitales navarros por traumatismos, ninguna de ellas por asta de toro.......

Al Hospital de Navarra fueron trasladadas dos personas, una de ellas un varón de 31 años de Madrid que resultó herido en la calle Estafeta, y otro joven de 21 años de Castellón por un traumatismo lumbar, también en la calle Estafeta. Otras dos personas fueron trasladadas al Hospital Virgen del Camino, una de ellas un americano policontusionado en el tramo de Mercaderes y herido en el pabellón auricular izquierdo. El segundo de los trasladados a este centro pamplonés es un escocés de 28 años que también resultó policontusionado en Santo Domingo. Los alcurrucén han renovado el comportamiento de las otras cuatro ocasiones en las que han visitado Pamplona y completaron el recorrido sin dejar ningún herido por asta a su paso por las calles de la ciudad, sin demasiadas aglomeraciones pese a ser el primer día de las fiestas. La manada, compuesta por un toro colorado y cinco negros, partió a las ocho en punto de los corrales de Santo Domingo agrupada y encabezada por los cabestros. Al final de este tramo, justo antes de la plaza del Ayuntamiento, uno de los astados tomó la cabeza y protagonizó los mayores momentos de peligro al resbalar a la entrada de Mercaderes y caer encima de uno de los corredores, creando confusión entre sus hermanos. Con un manso otra vez al mando de los bureles, enfilaron de manera compacta la calle Estafeta, donde se registraron algunas caídas de mozos y se vieron bonitas carreras al quedar huecos entre los animales. Un toro negro girón fue el encargado de provocar la mayor emoción en este tramo de la carrera al quedar descolgado del resto y permitir la cercanía de los corredores. Mientras sus cinco hermanos y los cabestros, ya más estirados, continuaban su camino por Telefónica y el callejón para entrar sin mayores complicaciones al coso y después a los chiqueros, el rezagado se entretuvo en la arena hasta que el trabajo de los dobladores lo condujo a los corrales.