Le dan duro. Un entrenador de un gimnasio en Shenyang, China, inició un nuevo negocio, alquilándose para que las mujeres estresadas le den una paliza, por el módico precio de 100 yuan (15 dólares) la media hora.
El denominado “Punching Bag” humano, se llama Xiao Lin, quien dice que además de hacer que las mujeres se liberen de sus preocupaciones, también practica sus artes marciales de defensa.
“Se acomoda bien dentro de mi día de trabajo. Ser un ‘punching bag’ para mujeres me permite hacer dinero extra y pone a prueba mi técnica de defensa al mismo tiempo”, explicó el entrenador, quien aún no se ha animado a contarle de su nueva ocupación a su familia.
El chino, explicó que pese a que el tiempo es de media hora, aún no ha tenido ninguna clienta que llegue a completar su turno. “Se cansan a los pocos minutos de pegarme y luego prefieren conversar, pero se van contentas y relajadas”, refirió.
El denominado “Punching Bag” humano, se llama Xiao Lin, quien dice que además de hacer que las mujeres se liberen de sus preocupaciones, también practica sus artes marciales de defensa.
“Se acomoda bien dentro de mi día de trabajo. Ser un ‘punching bag’ para mujeres me permite hacer dinero extra y pone a prueba mi técnica de defensa al mismo tiempo”, explicó el entrenador, quien aún no se ha animado a contarle de su nueva ocupación a su familia.
El chino, explicó que pese a que el tiempo es de media hora, aún no ha tenido ninguna clienta que llegue a completar su turno. “Se cansan a los pocos minutos de pegarme y luego prefieren conversar, pero se van contentas y relajadas”, refirió.
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